Profesor Marmordo: El hilo conductor de esta conocida obra unamuniana es bastante simple. Nos presenta a un joven de provincias apocado pero de buena posición que se enamora de una pianista que le desprecia y que ama a su vez a un tercero, un gandul. Pero Unamuno juega con este trillado argumento convirtiéndolo en una comedia que se burla de los estereotipos que utiliza y que va mucho más allá tanto en el fondo como en la forma.
Innova en la forma hasta el punto de calificar la obra como “nivola” (término que inventa) en vez de como novela. La mayor parte del libro está escrito en forma de diálogo e incluso, como él mismo explica desde la boca de uno de sus personajes, convierte la mayor parte de la narración en monólogos, como los del protagonista al hablar con su perro-confidente. Con este método, el autor trata de hacer la obra lo más cercana posible al lector, y llega a afirmar que es un trozo de vida.
Respecto al fondo, mientras desarrolla la farsa conductora, el autor expone las ideas filosóficas que pueblan la mayor parte de su obra, tanto de ficción como ensayística. Lo más destacable probablemente sea su concepción de la vida como sueño y como teatro (con huellas calderonianas), y su angustia ante la muerte, tema que nos deja algunas frases memorables y el conocido pasaje donde el protagonista habla con el propio autor. En esta escena de tinte existencialista maneja hábilmente distintos niveles de “realidad”, difuminando sus fronteras en esa niebla tan presente en toda la "nivola".
Sin llegar tan lejos como irían unos años más tarde Joyce y Proust (entre otros) en la renovación del género novelístico, Unamuno consigue escribir un libro de sumo interés y que se lee además sin grandes dificultades a pesar de la abundancia de temática filosófica gracias a su estilo directo y a su tono cómico.
Hace 9 meses
16 comentarios:
recuerdo el entusiasmo de mi profesor de literatura al destacar el hecho de que un personaje de novela se pusiera a conversar con el propio autor de la novela. una cosa completamente revolucionaria por entonces, al parecer. se le encendían los ojos, oye. mola entusiasmarse con estas cosas.
Sí, hoy ya no sorprende tanto y suscita menos "entusiasmo", pero sigue siendo brillante.
En la literatura, como en casi todas las artes, es difícil innovar tras la larga tradición que ya existe. Pero lo que me molesta más es que haya autores de hoy en día que utilicen técnicas o ideas de otros (de antes) sin que muchos lectores lo sepan, porque no han leído a los clásicos.
Una curiosidad... Compraste el texto de Unamuno o lo encontraste en la biblioteca de tus abuelos?
Lo compré, no sé si estará en la biblioteca de mis abuelos, aunque lo dudo. De todas formas, como buen enfermo de la literatura adoro atesorar libros.
Onumanu: ¿Quién sabe lo que significa "Orhoit Gutaz"?
Ed Leugim:¡Psss! Yo lo sé.
Onumanu: No, no, si no le preguntaba a nadie en concreto. Estaba engendrando un poema.
Ed Leugim: Significa "Acordaos de nosotros".
Onumanu: Oiga, nadie le ha dado vela en este entierro. Sea tan amable y lárguese, me impide concentrarme.
Ed Leugim: Es imposible. Yo sos vos y vos sos yo.
Onumanu: ¿éuQ?
Unamuno desterrado a mi querida isla escribió: "si el mundo culo tuviera Fuerteventura fuera".
a orillas del Bidasoa: vivamos
como habéis muerto, sin porqué, es lo cuerdo...
los ríos a la mar..., es la costumbre
y con ella pasamos...
No he leido nunca a Unamuno pero caerá antes en mis manos que Bukowski, eso seguro.
Es un escritor muy interesante pero... no con la vigencia de Dostoievski.
A Lobo le recomiendo la lectura del Doctor Faustus de Tomas Mann, por su espíritu fáustico, off course.
Lobito, coincido con la recomendación de Eximia! Agrego tambièn "Bajo el volcàn", a ver que te parece el prota.
Mmm, buena pinta de Unamuno, pero mi lista de libros a leer es tan infinita que no tiene límites. Cuando quiera cambiar de aires, te preguntaré, Profesor.
Sr. Chinaski
Eximia lectora, estoy de acuerdo con que Unamuno no es tan vigente como Dostoievski, que es uno de mis escritores favoritos, y creo que Marmordo piensa igual.
Desconocía que Mann hubiera revisado el mito faústico, así que muchas gracias por la información, me lo apunto.
Y tengo muchas ganas de leer Bajo el volcán, Rouse, este verano me tuve que recorrer 7 u 8 librerías hasta que conseguí un ejemplar. Pero no sé si leérmelo ya o dejármelo para el verano que viene.
Eximia dice que Thomas Mann reconstruye el mito en un territorio que conoce, el de la música y su versión es mucho más actualizada y ágil que la de Goethe, retórica por momentos.
Lobo, no esperes a otro verano para leer "Bajo el volcán", además ya empezó el otoño por allá.
Maldición, había empezado Bajo el volcán y resulta que hay un defecto en la edición y faltan 40 páginas... habrá que posponer hasta que consiga un ejemplar decente.
Qué terrible y también cómico. PAra mí que la compraste en una tienda de usados, porque si la compraste como nueva y la pagaste como tal con ese defecto es como para devolverla y reclamar lobeznus. Lamento mucho.
Jaja, hace poco cuando leí "Luchando a la Contra" de San Bukowski descubrí que mi edición tenía repetidas unas 50 páginas. Pasas de página y dices, esto no cuadra mucho...y me suena. Miré el número de página y me reí. Al menos no faltaba ninguna.
Ya sabes Lobo, a entrar y saquear la librería.
Sr. Chinaski
He encontrado el recibo: o me lo cambian o tendré que ir con Vinicius y el bidón de gasolina.
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