Una vez consideradas las sugerencias que se aportaron tras la primera crítica de bar, he decidido establecer una clasificación goliardesca para los bares de los que hable. La unidad de medida serán las Botellas de Oporto de Bukowski (BOBs), con una escala de 0 a 7. La escala es completamente arbitraria, los goliardos siempre hemos pasado del sistema métrico decimal y estamos acostumbrados a hacer graduaciones de 0 al 7, si a alguno no le gusta me importa poco, que se busque a otro crítico.
La cosa sería más o menos así:
0 Botellas de Oporto de Bukowski (BOBs): Garito al que un goliardo nunca (y he dicho nunca) debería ir, a no ser que quiera perder tan prestigioso título y recibir una severa paliza de sus amigos. Sitios así dan ganas de quitarse la vida.
1 BOB: Aunque no tanto como el anterior, sigue siendo un antro pésimo y sólo se admite la presencia de un goliardo si no discierne lo que ocurre porque está rozando el coma etílico.
2 BOBs: No es un lugar recomendable para un goliardo, su ambiente no casa con los gustos de alguien que aspire a ser un mito de la farra de su ciudad.
3 BOBs: Bar correcto, cumple su función pero sin que sea posible hablar de él apasionadamente.
4 BOBs: Buen bar, el goliardo de pro se siente como en su casa aunque no vaya en albornoz o en bata (a no ser que sea el Nota).
5 BOBs: Bar notable, el goliardo repetirá su visita con frecuencia y placer, pues está muy por encima de la media en todos los aspectos que valora.
6 BOBs: Ínclito bar, la decoración, el ambiente, la música y el alcohol se aúnan creando un paraíso goliardesco de visita obligada para cualquier noctívago.
7 BOBs: Bar – templo. Es una calificación especial que escapa ligeramente de los criterios aplicados para el resto. Se trata de un bar donde el goliardo encuentra el karma bukowskiano absoluto. Puede no ser tan perfecto técnicamente como un 6 BOBs, pero tiene algo que lo hace esotéricamente especial. Cada goliardo puede aplicar esta calificación un máximo de cuatro veces en su vida.
Notas:
Este baremo será válido tanto para bares en sí como para discotecas, cafeterías y otros locales donde se distribuya alcohol.
El crítico podrá establecer subjetivamente puntos a favor o en contra para completar la calificación con elementos no intrínsecos a las BOBs otorgadas. Generalmente se tratará de un +1 o un –1 y, en casos excepcionales, +2 o –2. Por ejemplo, un bar puede ser un 3 BOBs +1 por la excepcional calidad-precio del alcohol dispensado, lo que lo equipararía con un 4 BOBs. En sentido contrario, un bar podría ser un 5 BOBs –2 por la absoluta ausencia de féminas que se depilen las axilas y el bigote. Se pueden incluso acumular los puntos extra, hablaríamos por ejemplo de un bar 4 BOBs +1 por el carisma de su dueño +1por la excelencia de la música que se pincha, equiparándolo con un bar 6 BOBs. La máxima calificación que se puede conseguir con adiciones es 6 BOBs, ya hemos comentado que 7 BOBs es una categoría aparte que se concede de forma honorífica.
Con este sistema, la calificación del Bar del que hablé el otro día no puede ser sino de 7 BOBs.
Hace 9 meses
6 comentarios:
¿Y que puntuación le das al bar en el que estuviste este fin de semana?
Mmm, es una calificación difícil, haría falta un análisis detallado y sería algo extraño para un bar que aparece y desaparece como el Guadiana.
Desde luego, si contamos la música del sábado (la peor orquesta que se ha oído en la historia) la puntuación sería de 0 BOBs, pero trataré de considerarla como algo que nunca se va a repetir.
Entonces, considerando el buen precio de la bebida, el ambiente distendido al aire libre, la agradable compañía, la cantidad de féminas por maromo, la simpatía de los camareros, etcétera... le pondría 5 BOBs.
¿Tantas éramos? Me da que se te iban los ojos a la nueva hornada de niñas de 14 años que empiezan a despuntar. Te perdiste cuando le reclamaron al alcalde donde estaban los hombres.
Y sobre la música, no es su fuerte. Ni viernes, ni sábado, ni cuando pincha el DJ.
Coincido con el Sr. Lobo de Bar en que era la peor orquesta de la faz de la tierra, pero no estoy tan seguro de que no se vaya a repetir.
Lo de las féminas: si, como bien dice oria, no es por la nueva hornada, el ratio no era tan alto.
Y discrepo con oria, cuando pincha el DJ, o mejor dicho los DJs, la música mejora drásticamente, aunque se abuse en exceso del ****** de Bon Jovi.
Sr. Chinaski
Cierto que la nueva hornada de féminas promete, pero intento no fijarme mucho, paso de acabar encerrado por tal delito. Si voy al trullo que sea por asaltar el Bank of America.
No he puesto que la proporción fuera buena, sino simplemente que era uno de los factores que tenía en consideración. De todas formas, los bares que suelo frecuentar tienen una proporción aproximada de entre 0,1 y 0,3 chicas por maromo y era complicado que fuese peor. Es lo que tiene que no me guste el pachangueo.
De la música del viernes no me acuerdo.
a tanto toca? que chungo...
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