Leyendo este blog hay quien se divierte, quien se duerme, quien reflexiona, tampoco falta quien se escandaliza, más raros son los casos de quienes han conseguido llegar al orgasmo, de lo que no se tiene constancia es de que nadie haya recuperado la cordura.
Dr. Strangelove, hijo del peculiar personaje kubrickiano, hombre de cierta edad y constatada degeneración, crítico de cine, experto en sexo tántrico y patafísico nuclear.
Profesor Marmordo, encargado de la sección literaria, tanto de la crítica como de presentar textos propios y de sus enfermizos amigos.
Tío Matt (de Bar), incansable traveler y mentor de Lobo de Bar en muchos aspectos de la vida.
Los amigos de Tucson, Arizona, suelen aportar interesantes documentos y noticias de otros lugares del planeta y parte del universo.
Hunter, periodista gonzo inclinado a todo tipo de excesos y ahora infiltrado en el terrible mundo de los negocios.
Vinicius Mond, ácido analista político-económico y conjurador radical, probable ascendiente de Mustafá Mond. Los demás miembros de la conjura no nos responsabilizamos de las opiniones de este sociópata y no pagaremos sus fianzas.
Narrador omnisciente, no sabemos de dónde coj**** sale ni cómo se entera de las cosas, pero no se le escapa una.
si es que hasta mi me dan ganas de ser pescador con una canción así, coño! anyway. el desconcierto progresivo del coro en la canción del leñador es buenísimo. aquí para sentirse realizado y feliz había que tener un camión, mascar tabaco y meter mano a las chicas.
Yo sigo al ritmo de siempre, uno o dos post por semana, ¿no serás tú el que no para de currar?
La canción de los Waterboys me parece brutal, y en nuestro país creo que no es muy conocida...
El sketch del leñador empezaba con un peluquero psicópata que luego comenta que le hubiera gustado ser leñador, si alguien lo quiere ver entero está en el youtube http://www.youtube.com/watch?v=xToPCaNxaow&feature=related
La canción de los Waterboys es un temazo donde los haya, como cualquier cosa que Don Mike Scott se haya animado a hacer. Aunque nació el mismo día que yo, yo paciencia con la caña como que no, y de Policía Montada tampoco me veo. De todas maneras, si me toca la lotería o se me hinchan mucho los mismísimos (hay posibilidades de esto 2º), no descarto entrar patinando vestido con tutú por el pasillo de la oficina y saludando cual Reina Madre... Los Python estarían orgullosos
Yo tampoco tengo paciencia con la caña y, no nací el mismo día que Mike Scott, pero casi. Y una entrada en la oficina como la que mencionas sería digna de elogio, no sólo de los Python, sino de todos los que intentamos mantenernos cuerdos con la ayuda de la locura.
Bienvenido, Manuel, espero que este blog no te parezca eso, un truñete :p
Y se me había olvidado comentar las recomendaciones para ser feliz de Loquillo, que tampoco me acaban de convencer, al menos en lo que respecta al camión y a mascar tabaco...
9 comentarios:
si es que hasta mi me dan ganas de ser pescador con una canción así, coño! anyway. el desconcierto progresivo del coro en la canción del leñador es buenísimo. aquí para sentirse realizado y feliz había que tener un camión, mascar tabaco y meter mano a las chicas.
Pero tú trabajas o algo? Vaya racha llevas de bloguear...
Sr. Chinaski
Yo sigo al ritmo de siempre, uno o dos post por semana, ¿no serás tú el que no para de currar?
La canción de los Waterboys me parece brutal, y en nuestro país creo que no es muy conocida...
El sketch del leñador empezaba con un peluquero psicópata que luego comenta que le hubiera gustado ser leñador, si alguien lo quiere ver entero está en el youtube http://www.youtube.com/watch?v=xToPCaNxaow&feature=related
Joé tardó tanto en abriri que ya no acuerdo de esa palabra que escribiste en un blog "truñete" Graciosa, la verdad. Un saludo desde Galicia
La canción de los Waterboys es un temazo donde los haya, como cualquier cosa que Don Mike Scott se haya animado a hacer.
Aunque nació el mismo día que yo, yo paciencia con la caña como que no, y de Policía Montada tampoco me veo. De todas maneras, si me toca la lotería o se me hinchan mucho los mismísimos (hay posibilidades de esto 2º), no descarto entrar patinando vestido con tutú por el pasillo de la oficina y saludando cual Reina Madre... Los Python estarían orgullosos
Yo tampoco tengo paciencia con la caña y, no nací el mismo día que Mike Scott, pero casi. Y una entrada en la oficina como la que mencionas sería digna de elogio, no sólo de los Python, sino de todos los que intentamos mantenernos cuerdos con la ayuda de la locura.
Bienvenido, Manuel, espero que este blog no te parezca eso, un truñete :p
Y se me había olvidado comentar las recomendaciones para ser feliz de Loquillo, que tampoco me acaban de convencer, al menos en lo que respecta al camión y a mascar tabaco...
Y menos que lo diga con esas pintas, ese tío no a entrao en un camión en su vida!
Desde luego, no como camionero...
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