Vinicius Mond: He abierto mi propio blog cansado de la quietud de esta conjura. Se llama “El limbo revolucionario”.
Los goliardos son buena gente (buena gente en el sentido que yo le doy a la palabra, para individuos más moderados los goliardos son unos gandules y unos hijos de puta), pero están perdiendo el Norte. Esta bitácora ha tomado una dirección demasiado autocomplaciente, no se publican mas que post de temática viajera, cultural, erótica o dipsómana, y las críticas sociales que se vierten (salvo las mías) no son más que pataletas sin trascendencia.
Estos cabrones hedonistas no intentan cambiar nada, se convencen de que no es posible y se refugian en su alcoholismo, su falsa intelectualidad y su vivir disipado.
Yo, Vinicius Mond, no lo veo así. Por mis venas corre la herencia genética de los emperadores romanos antoninos y no la de Napoleón pero sí la de Murat. La revolución que yo lidere cambiará el mundo. No puedo garantizar que, a largo plazo, este cambio no sea a peor, pero eso no me importa, lo fundamental es romper la dinámica lamentable en la que vivimos inmersos.
Quien quiera seguirme, que entre aquí.
Hace 9 meses
5 comentarios:
Joder, otra paginita con la que perder el tiempo...
si es que, tanta gente junta en el mismo espacio, gente tan dispar, es normal el desencuentro!!
algo chalaos ya están, ya
Ze Tubarao, ingrato, cabrón :p
Al menos no hemos llegado a las manos, Raúl. Tras unas copas nos pusimos de acuerdo.
Elena, pero no decías el otro día que tenemos mens sana?
vaya parece que tengo problemas de comunicación, porque mi intención era expresar lo contrario...
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